sábado, agosto 26, 2006

007, canciones con licencia para matar

Ya faltan pocos meses para el estreno de la nueva película de James Bond, Casino Royale que marcará el polémico debut de Daniel Craig como nuevo agente 007.

Pero si les digo la verdad, a mi lo que me interesa de esta nueva entrega más que cómo le quedará el papel a Craig, es escuchar la canción de los créditos de Casino Royale. Y es que con las películas de James Bond al final da igual que sean un trullo, ya casi solo merecen la pena por esos cinco minutos de créditos tras el teaser con el que comienzan siempre las películas de 007.

Y echando un vistazo a la veintena de películas precedentes nos encontramos con pequeñas maravillas, desde el ya clásico Goldfinger o Diamonds are forever de Shirley Bassey, al You only live twice de Nancy Sinatra, Live and let die de Paul McCartney, A view to kill de Duran Duran, y tantas otras más que han ayudado a cimentar la leyenda cinematográfica de las películas del espía británico.
Y es que cuando se da la circunstancia de un buen artista con una buena canción ya tenemos un pequeño clásico entre las manos como cuando uno de mis grupos favoritos Garbage hizo la canción homónima de The world is not enough, una canción 100% bondiana.




Todavía no he podido escuchar la canción elegida para Casino Royale titulada “You Know my name” interpretada por Chris Cornell y compuesta por el ya clásico David Arnold que al menos ya es una garantía de calidad. Y es que la canción de la la peli anterior, el Die another day de Madonna personalmente me parece de lejos la peor canción que ha tenido una película de Bond.

Puestos a pedir a mi me hubiera gustado ver una canción de James Bond de Björk, la sin par artista islandesa seguro que pergeñaba una canción que no dejaría indiferente a nadie con su particular y personal estilo...

En fin, dentro de poco saldremos de dudas.

El final de Asa

He estado unas cuantas semanas demorando el momento, pero al fin me leí los dos últimos tomos de Asa el Ejecutor con los que finaliza la serie.
La melancolía me invade al mirar la última página, dos viñetas con Asa y Kasijiro caminando juntos de espaldas al lector y alejándose hacia el horizonte.

Voy a echar mucho de menos la ración mensual de Asa, al igual que ocurrió con el Lobo Solitario y su Cachorro. Koike y Kojima han vuelto ha crear una atmósfera, un ambiente, unos personajes formidables. De nuevo nos encontramos ante un magnifico fresco del Japón del Shogunato, de sus gentes, de cómo vivían, pero incluso más allá, los autores desentrañan aspectos universales de la naturaleza humana, sus luces y sus sombras, sin concesiones en ocasiones, carnal y sangriento, pero a su vez bello y poético. Toda una lección de maestría.

Cuando hice la primera reseña en este blog de Asa el Ejecutor llegué a decir que me estaba gustando más que el Lobo Solitario y su Cachorro. Quizás ahora no diría tanto, y es que sería un poco injusto comparar ambas obras, tanto en estructura como en los personajes que protagonizaban ambas.
La estructura en capítulos independientes de Asa El Ejecutor lo hace muy fácil de leer, sin tener que preocuparte de continuar una trama mes a mes, cosa que al principio también ocurría en el Lobo Solitario pero que con el tiempo dio paso a la gran trama principal de la venganza contra los Yagnu que acabo devorando toda la historia y quizás alargando un poquito el final de la historia innecesariamente, con lo cual tras terminar la lectura del Lobo, la estructura de Asa fue un soplo de aire fresco.
Pero al final quizás si que he echado de menos en Asa El Ejecutor que los autores hubieran incluido una trama general que abarcase aunque fuera de manera secundaria toda la historia, más allá del crecimiento personal de Asaemon Yamada o de los secundarios más o menos fijos que han ido apareciendo por sus páginas, y que en estos últimos tomos han llegado a robarle el protagonismo al propio Asaemon, y es que los personajes de Kasajiro y Sinko, calan tanto que uno siente que Koike no haya dedicado una serie a las andanzas de esta extraña pareja.

Esperemos que Planeta se decida a publicar Path of the Assassin también de Koike y Kojima, porque acostumbrado tras dos años a tener una ración mensual de estos autores se me va a hacer muy raro los próximos meses no llevarme a la boca nada de ellos.
Aunque siempre quedará releer tanto el Lobo como Asa y recordar viejos momentos que nos estremecieron como en muy pocas ocasiones ha llegado a ocurrir. Esa es la magia de las obras de Koike y Kojima

sábado, agosto 19, 2006

Angel 4 Temporada



Normalmente a la hora de escribir un post para este blog procuro que sobre lo que voy a hablar este fresco en mi memoria ya sea una película o lectura.
Hoy no va a ser así. El caso es que ya hace más de dos meses desde que acabe el visionado de la cuarta temporada de Ángel, pero por diversos motivos iba postergando el post dedicada a la misma, cada vez más y más hasta llegar a un punto en que me he planteado si hacer este post o no. Al final y dado que si que lo había hecho de las anteriores temporadas he pensado que sería una pena el no hacerlo, por lo que al final voy a quebrar una de las dos reglas que tengo a la hora de escribir en este blog, escribir siempre con las cosas recientes para no dejarme llevar por la en muchas ocasiones engañosa memoria que puede llevar a enmarañar el recuerdo de las cosas haciéndolas más gratas de lo que eran o al contrario.

Pero pasemos de esta introducción y vayamos al tema del post. ¿Qué me ha parecido la 4ª temporada de Ángel?. La verdad, decepcionante con algún momento brillante. Sobre todo si la comparamos con las dos anteriores que me dejaron tan buen sabor de boca y que llegan a unos niveles muy difíciles de alcanzar. Será por eso la sensación que tiene uno de que esta temporada pincha de mala manera.
Y eso que empieza de manera interesante, resolviendo el gran cliffhanger con que terminaba la 3ª temporada. Con la mayoría de los personajes colocados en tal posición que se nos hace la boca agua pensando en lo que puede dar de si el desarrollo de los mismos. Todas esas nuevas parejas que se han formado, las nuevas alianzas que han surgido, etc, etc.
Pero no, solo se dedican a dar vueltas y vueltas a lo tonto, dando palos de ciego, sin saber donde ir, enfrascados en la trama del gran demonio malo de la temporada, y eso que a priori podría parecer interesante, pero todo es presentado de tal manera que no llega a enganchar y a los pocos episodios ya estás deseando que le den una buena patada en el culo al maldito demonio este y que pasen a otro tema. Casi parece que Whedon y demás guionistas estaban gastando las ideas buenas para la por entonces coetánea Firefly de triste y corto final.

Vamos que en este punto la serie parecía condenada al más absoluto aburrimiento. Menos mal que los guionistas reaccionaron y para salvarla trajeron de vuelta al personaje que hizo de la 2ª temporada de Buffy una de las mejores de la serie, Ángelus, malvado y atractivo como pocos. David Boreanaz se lo debe pasar pipa encarnándolo y eso luego se nota en la pantalla. La aparición del lado oscuro de Ángel trae un soplo de aire fresco a la temporada y las cosas se ponen moviditas con un puñado de episodios de ritmo endiablado y unos continuarás que te hacen dar un respingo en el sofá, momentos gozosos que te hacen recuperar la fe en la temporada, como la sorprendente revelación del autentico mal que mueve los hilos, la muerte de un secundario que nos había acompañado desde la primera temporada y el regreso al Buffyverso de Faith.
Y hubiera sido interesante ver como iba a desarrollarse la cosa, pero el embarazo de Charisma Carpenter me hace suponer que los guionistas tuvieron que cambiar el argumento sobre la marcha, y el final de la temporada con la “maravillosa” Jasmine se resiente algo, volvemos otra vez a un punto muerto en donde solo queremos ya que esto termine de una vez.

Menos mal que aún nos queda el último episodio. Hubo dudas si la serie iba a ser cancelada por la cadena en esta cuarta temporada, por ello es interesante este último episodio por lo que supone, un epílogo a lo que había sido la serie hasta ahora, y a su vez un prólogo de lo que podría serlo en caso de que esta continuase, cosa que por suerte sucedió. Y es que la oferta que reciben Ángel y sus amigos es muy jugosa y difícil de rechazar lo cual nos lleva a un tema muy viejo pero no por ello menos interesante que se puede resumir en un viejo refrán, “el camino del infierno está empedrado de buenas intenciones”.

Pero para ver el desarrollo del mismo tendré que esperar a la quinta y última temporada de la serie. Ganas y curiosidad no me faltan.