lunes, octubre 31, 2005

¡Es la hora de las compras!

Llegó al fin el Salón del Manga y lo que eso conlleva, una invasión de novedades en las librerías especializadas que junto a las que saldrán en diciembre para Expocómic hacen del fin de año comiquero una autentica orgía consumista.

Echando un vistazo en mi librería habitual de todo lo que había llegado solo me he comprado material de Planeta DeAgostini, dado que de otras editoriales que han sacado novedades para el Salón del Manga, como Norma, Mangaline, Ivrea, etc no me interesaba nada (a falta del segundo álbum de Gil St. Andre publicado por Glenat que no lo he visto, supongo que no saldrá como novedad del Salón).

Me ha llamado la atención que otras editoriales como Panini, Aleta y Recerca no saquen ninguna novedad para este evento o las hayan sacado unas semanas antes, supongo que para evitarse la competencia feroz en cuanto a las novedades de las demás editoriales. Personalmente como comprador se lo agradezco, porque la cantidad de cosas que salen en estos eventos son en ocasiones realmente mareantes y uno ya no sabe que comprar o que dejar de comprar.

Los elegidos para la gloria han sido estos:

-Wonder Woman: Gente Maravillosa, primer tomo de la princesa amazona que publica Planeta con los últimos números que realizase Phil Jiménez. Es de vergüenza ajena la calidad de reproducción que tiene este tomo, mata completamente el detallado dibujo de Jiménez. Que una de las gigantes editoriales del cómic en España saque productos con esa calidad de imagen es inexplicable. Si los materiales de reproducción que tienen son defectuosos o de una calidad insuficientes, antes de sacar un mal producto a la calle es preferible retrasarlo hasta que se consiga material de reproducción de calidad porque este tomo realmente hace daño a la vista.

-The Sandman Mystery Theatre: La Vamp. De Wagner, Seagle y Guy Davis. Ya echaba de menos tras el fracasado intento de hace unos años por parte de Norma Editorial de volver a saber algo de Wesley Dodds, Dian Belmont y demás personajes que viven en esa opresiva y oscura representación que se hace en la serie del New York de los años 30.

-Asa el Ejecutor #1, tras el fin del Lobo Solitario y su Cachorro nos llega una obra anterior de Koike y Kojima, donde nos reencontramos con Asaemon, el probador de las espadas del Shôgun a quien ya conocimos en un capitulo del Lobo Solitario. En esta serie seremos testigos del proceso que lleva a Asaemon a tal cargo y si esta serie es la mitad de buena que el Lobo Solitario nos espera unas buenas dosis de lectura.

-JLA: Escalera al Cielo, de Waid y Hitch, inexplicablemente esta obra permanecía inédita en España pese al indudable tirón comercial de sus autores. Es de agradecer que Planeta no haya respetado el engorroso e inmanejable formato tabloide original.

-Nuevos Titanes #1 de Wolfman y Pérez, por fin aparece la reedición de unos tebeos que hicieron historia en los años 80. Se hace extraño ver en color un tebeo publicado en formato pequeño tipo Biblioteca Marvel.

-Animal Man: La hora de la Bestia y Uñas y dientes, prácticamente han coincido en los estantes estos dos tomos de la peculiar obra de Grant Morrison.

Me he quedado con las ganas de comprar el Doble Mascara de Dufaux y Jamar, pero dado el elevado precio de los álbumes europeos (pese a ser precios de Planeta) prefiero esperar a oír alguna crítica favorable antes que arriesgarme en su compra.
Y me ha llamado poderosamente la atención la nueva edición de V de Vendetta que ha sacado Planeta DeAgostini, a mayor tamaño y mejor precio que la anterior de Norma Editorial. Toda una preciosidad.

viernes, octubre 28, 2005

Zafarrancho de combate

En mi cuarto guardo los cómics, libros y DVDs en unas cuantas estanterias tal que así


así


así


y así entre otros muchos sitios.


En estos precisos momentos todo lo que ven en esas estanterías esta así,


Mañana me van a traer un par más de estanterias nuevas para poder seguir acumulando más libros, tebeos, DVDs y CDs y para que cabiese todo hay que mover las estanterias que ya estaban para hacer más sitio, por eso el porque de la última foto.

Sacar las cosas ha sido lo más fácil, ahora bien, me da que volverlo a poner todo en ordén ya no va a ser tan sencillo. Creo que mañana me tocara jugar al tetris con mis cosas para que vuelvan a caber donde estaban. De solo pensarlo ya me duele la espalda. ¡auch!

miércoles, octubre 26, 2005

¿Pero qué hace Todd McFarlane aquí?

Que apareciese en los documentales del DVD de Spider-man lo comprendo, fue uno de los dibujantes más influyentes del trepamuros. Que apareciese en un documental frances sobre superhéroes, pues vale, también es entendible, los personajes que ha dibujado durante su carrera pertenecen a ese género.

Pero que Todd McFarlane aparezca en uno de los extras de Animatrix hablando de manga japonés como que no tiene mucha razón de ser. Porque mira que hay dibujantes anglos que están influenciados por el estilo de hacer cómics japonés, pero ¿McFarlane?. Parece que no encontraron a nadie mejor y Todd pasaba por allí.

Solo ya me falto que hubiera aparecido de repente Stan Lee para loar la narrativa japonesa. Eso hubiera sido ya el "summum".

De tebeos y marketing

A veces me da la sensación de que en los comics americanos ya no importa la historia ni el dibujo con el que se cuenta esa historia, si es que alguna vez importó.
Ya no tiene peso el mes a mes, como construyes la historia, a los personajes, el ambiente, todo aquello donde lo único que cuenta es la habilidad de los creadores para tejer un todo que no necesita de nada más para sostenerse por si mismo.

Ahora no, eso no sirve para nada, importa mas vender el producto que su contenido, hacer que se hable de él, que sea la comidilla de todo el mundo, que parezca que no existe nada más incluso meses antes de que el producto aparezca en la calle.
Que Newsarama o Wizard nos digan que es la leche, que es lo mejor del siglo, el evento de todos los eventos que ningún lector debería perderse por nada del mundo.

Si, lo importante es como nos lo venden, en que envoltorio, atrayente y brillante, la luz que atrae a la polilla. ¿Y que luego esta vacío de contenido?. “¿Y eso que diablos nos importa?”, dirán. “Nosotros solo queremos coger la pasta y preparar el siguiente crossover o la serie con los autores Hot por los que todo el mundo babea que harán que la compres sin pensártelo dos veces”.

Y lees House of M o Infinite Crisis y ves que es más de lo mismo, coges All Star Batman y Robin de Frank Miller y Jim Lee y no entiendes como semejante bazofia ha podido ver la luz. Pero en el fondo lo comprendes, o si que lo comprendes. El contenido ya no importa, podrían ser perfectamente páginas y páginas en blanco, refritos de situaciones e historias contadas mil y un veces. No importa lo que publicamos sino como lo publicamos.
Todo se reduce al puro y frío marketing.

miércoles, octubre 19, 2005

De que me suena a mi esto.

Como con esto de la huelga de transportes no había llegado nada nuevo a la librería y me apetecía incarle el diente a algo. Por el mono de lectura me decidí a probar con una nueva serie manga, Vagabond de Takehiko Inoue.
Había oído muy buenas críticas de esta obra, habiendo sido el autor muy premiado por la misma tanto por la propia industria como mejor Manga como incluso por el Ministerio de Cultura Japonés. (Se imaginan en España al Ministerio de Cultura dar un premio a un cómic, bwhahahahaha).

La obra es una adaptación de una novela japonesa llamada “Musashi” de Eiji Yoshikawa que narra la vida de un famoso personaje histórico japonés Musashi Miyamoto, que vivió durante el siglo XVI y que llegó a ser el máximo exponente de luchador en cuanto a técnicas de espada de su época.

Pero no es en el tebeo sobre el que quería centrarme hoy sino en otro aspecto.
Para empezar indicar que nunca había oído hablar de Musashi Miyamoto en la vida, para mi era tan conocido como puede serlo para un japonés la figura del Cid Campeador, vamos.
Fue por esto que me produjo una extraña sensación que mientras lo iba leyenda, la trama me estuviera resultando conocida.

Un par de jóvenes que en busca de fama y fortuna van a la guerra, su bando pierde y se las ven para sobrevivir mientras huyen de los soldados que buscan supervivientes para rematarlos. “Hasta aquí bien, vale, es una historia muy común, se puede dar la coincidencia con cientos de otras historias, es posible” me dije para mi.

Sigo leyendo, los dos jóvenes se encuentran con una madre y su hija que les ayudan, estas se dedican a robar a los guerreros muertos. Salta la primera alarma, “Mmmmm, vaya esto me suena de algo, pero de que, espera, sí, aquella película japonesa, Onibaba se llamaba, pero las protagonistas no eran madre e hija, sino suegra y nuera. Y no ayudaban a los soldados huidos sino que les mataban para robarles, aparte que en la película la madre era un vieja horrible todo lo contrario a la madre del tebeo que es bastante atractiva y joven. Se parecen pero no es la misma historia”.

La trama avanza y uno de los jóvenes se enrolla con la madre pese a tener una prometida en el pueblo, entonces por las circunstancias tienen que huir abandonando al otro fugitivo que vuelve a su pueblo para decir a la madre de su amigo y a su prometida que pese a estar vivo no va a volver. Abro los ojos como platos, “Por dios, ¡¿pero donde he visto esto antes?!. Como ahora la madre de su amigo echándole la culpa de que su hijo no haya vuelto de la guerra le delate a las autoridades esto va a dejar de ser una casualidad”. Leo unas páginas más y justo, eso es lo que sucede precisamente.
Cierro el tomo con determinación, plaf, arrugo el morro y trato de recordar. La novela original en que se basa estoy seguro de que no la he leído, en mi vida solo he leído un libro que estuviese escrito por un japonés, “Samurai” de Hisako Matsubara y aquella iba de una mujer que esperaba la vuelta de su marido que había emigrado a América a principios del siglo XIX.
Por tanto si no es algo que he leído, tiene que ser una película. Este año he visto mucho cine japonés, pero de Kurosawa estoy seguro que no es, Kitano de época solo he visto Zatoichi y tampoco, 47 Ronin no... Y entonces se encendió la luz.

Samurai” (sin nada que ver con el libro de Matsubara) de Hinoshi Inagaki y protagonizada por el gran Toshiro Mifune. Es la misma historia y el protagonista de ambas se llamaban igual , Takezo, pero claro el Takezo de la historieta esta plasmado como un jovenzuelo de 17 años y en cambio el Takezo de la película es Toshiro Mifune que no aparenta ni de lejos esa edad, por eso no hacía la conexión. Pero no tenía ni idea de que la película de Inagaki estuviera basado en un personaje real.

Ahora la cosa es que ya se como continua la historia del manga, por lo menos hasta cierto punto, Samurai era la primera parte de una trilogía de la cual solo he visto la primera. Me falta por ver las dos siguientes que supongo que completaran la vida de Takezo. Con lo cual me deja dos posibilidades de saber como continua la historia, o ver la dos siguientes películas de Samurai o leer los siguientes tomos de Vagabond.
Aunque siempre podría buscar la novela de Yoshikawa y me ahorraba todo lo anterior.

Vamos, que por elegir diferentes medios para contar la misma historia no me voy a quedar sin conocerla.

martes, octubre 11, 2005

Lobo Solitario y su Cachorro, acercandonos al final



Estoy leyendo estos días el decimonoveno y penúltimo tomo del “Lobo solitario y su cachorro” y me esta produciendo esa rara sensación que se produce cuando lees uno de esos libros que te hacen disfrutar como nunca. Por un lado ganas de terminarlo para conocer el final, pero por otro lado cierta tristeza porque al llegar a ese final tendré que despedirme de unos personajes a los que he cogido mucho cariño y aprecio pese a lo tremebundos que puedan presentársenos estos en ocasiones.
Y es que como ya comente tiempo atrás en un post dedicado a esta obra, la historia se nos presenta sin concesiones, dura, sin dejar un respiro al lector que se ve atrapado en este remolino de sangre, violencia y honor que sin duda no dejará indiferente a nadie.

Por sus más de 80000 colosales páginas hemos visto pasar seguramente casi a un centenar de personajes que nos han mostrado lo mejor y lo peor de la naturaleza humana y de una sociedad, la japonesa durante la época del shogunato Tokugawa. Hemos reído y llorado, nos hemos estremecido y sorprendido con el transcurrir de sus protagonistas, en ese “camino al infierno” en el que viven Itto Ogami y su hijo Daigoro.

Podríamos criticarle a Koike, el escritor, el poder haber terminado la historia hace unos cuantos tomos, en vez de alargar la trama al añadir nuevos personajes y situaciones que enmarañan más la madeja, pero no merece la pena, porque estan incluidas con tal maestría, y son de tal calado y belleza algunos interludios que al final no importa y no queda más que disfrutarlos para nuestro deleite, como ejemplo toda la subtrama del catador del Shogun, Abe el feo.

Ahora al fin todas las fichas están en su sitio, el camino del infierno esta a punto de concluir, el antiguo albacea del Shogun, Itto Ogami se enfrentará definitivamente con el hombre que le hiciera caer en desgracia 4 años antes, Retsudo Yagyu. Se ha recorrido todo el circulo. Y lo mejor es que la verdad no tengo ni idea de cómo puede acabar todo. Será trágico, eso seguro. Pero lo mejor será dejarse de adivinaciones, sentarse uno, leer y simplemente disfrutarlo.