sábado, abril 16, 2005

Buscando a XIII desesperadamente

Posted by Hello


Hoy nos vamos a centrar en una de las series europeas que mejor han sabido mantener el suspense y la emoción a sus lectores en las dos décadas que lleva publicándose. Me estoy refiriendo a XIII.
El primer álbum “El día del sol negro” salió a la venta en enero de 1984 de la mano de la editorial Dargaud. Los creadores y autores de la misma son el afamado guionista belga Jean Van Hamme y del dibujante también belga William Vance.

Es curiosa la trayectoria de Van Hamme, con varias licenciaturas a sus espaldas se dedicaba al mundo de las finanzas, siendo directivo de Philips-Belgique para abandonar su puesto en pos de dedicarse a esto de la Bande Designée y todo gracias a que su mujer era modelo del dibujante Paul Cuvelier y no podría haber hecho mejor elección porque el éxito de Van Hamme le ha hecho a día de hoy millonario, en parte gracias al XIII al que nos dedicamos hoy como también por otras series de renombre que salen de su pluma como Thorgal o las adaptaciones al cómic de sus libros de Largo Winch por citar sus más conocidas.

William Vance, nacido como William Van Cutsen y asentado curiosamente en España, lleva más de 40 años dedicado al tablero de dibujo, comenzó realizando ilustraciones para la revista Tintin. En 1964 comienza su primera serie Howard Flynn. En 1965 junto al guionista Greg crean el western Ringo y va a ser también con Greg que en 1967 dan a luz la serie Bruno Brazil, una especie de agente secreto. Es curioso el final que le dieron a la serie pues en el último número masacran a los secundarios que acompañaban al protagonista en sus aventuras. (No me importaría nada que alguna editorial sacase en España una nueva edición de Bruno Brazil un año de estos, tienen en mi a un seguro comprador).
En 1971 sustituye a Gérard Fortan en la serie Bob Morane junto al guionista Henri Vernes. En 1991 junto a Jean Giraud realiza dos álbumes de un arco de tres números de Blueberry pero el tercer número no podrá acabarlo.

El primer álbum de XIII comenzaba con la llegada de un hombre herido de un disparo en la cabeza a una playa donde era recogido por una pareja de ancianos. La herida afecta al área del cerebro encargada de la memoria, por lo que el misterioso hombre es incapaz de recordar nada de su pasado. Con pocas pistas, entre ellas el número 13 en números romanos que tiene tatuado en la clavícula, empezará una búsqueda de sus orígenes, pero esta se va a ver salpicada de peligros a cada paso que da. Y es que su pasado puede ser más complicado de lo que podría creer en un principio, con varias posibles identidades, en ocasiones falsas, que le convierten desde el asesino del presidente de los Estados Unidos unos meses antes, a un militar americano, pasando hasta por un terrorista de IRA, todo ello mezclado con una trama de política ficción en la que una conspiración quiere tomar el control del gobierno americano y XIII es una pieza clave de la misma que todo el mundo quiere ver eliminada.
La gracia de la serie es que los autores juegan con el lector a su antojo, sorprendiéndolo a cada paso, porque cuando parece que el protagonista ha descubierto al fin la verdad, estos nos demuestran que todo lo que creíamos en realidad era falso, convirtiéndose la historia en un sinfín de giros inesperados que siempre pillan desprevenido a uno.

Todos estos ingredientes han hecho de XIII un auténtico éxito, con ventas millonarias, cada álbum nuevo se coloca en la lista de los libros más vendidos en Francia y la campaña de publicidad que acompaña a estos es francamente impensable por estos lares, con anuncios en cines, TV o incluso publicidad en cabinas telefónicas.

Y este puede ser sinceramente su gran problema, que pueda morir por el éxito. Leyendo las tres últimas entregas se nota ya cierto cansancio y repetición en las tramas. Y es que cada nuevo giro que da la serie da la sensación de ya visto y poco novedoso, que el argumento realmente ya no da más de si. Aparte que gráficamente se hace muy repetitivo, con Vance dibujando una y otra vez primeros planos de los personajes, lo cual llega a ser algo cansino.

Uno no puede más que esperar que los autores al final se decidan a poner fin a la historia, y es que sería una pena que tras tantos años y tan buenos momentos que nos ha hecho pasar la serie termine agonizando poco a poco con entregas cada vez más soporíferas solo porque económicamente es más rentable mantener a la serie viva.

XIII y sus lectores al menos nos merecemos eso, un buen final.

3 comentarios:

Anjin-san dijo...

Jejeje, si eso es una cosa que siempre le han echado en cara a Van Hamme, que el comienzo de XIII y "The Bourne Identity" comienzan igual y tienen elementos demasiado comunes.
Lo que no se es si Van Hamme conocía o no la novela original o fue una casualidad. Lo que me recuerda el caso de The Walking Dead de Robert Kirkman y la película 28 días después que comenzaban igual y Kirkman dice que cuando vio la película se quedo patidifuso al ver la semejanza cuando el había pensado en ese comienzo mucho antes de ver la peli.
No he leido las novelas de Ludlum,ni visto las películas de Bourne pero por lo visto en los trailers de los cines creo que luego las tramas de ambas van por caminos diferentes aunque las dos tengan el mismo punto de partida.

Anónimo dijo...

Yo te recomiendo una miniserie que hicieron sobre la novela de Ludlum, de finales de los 80, dirigida por Roger Young. Es mucho más realista que las pelis posteriores, y los personajes los encuentro con más carácter.

Anónimo dijo...

Y el anterior comentario era mío.
Bye.