sábado, marzo 19, 2005

La Tumba de Drácula


Posted by Hello

Hay tebeos que seguramente no merezcan la calificación de obra maestra, o decisivos en el devenir del medio, pero que como lector me han producido tal nivel de satisfacción que poco me importa lo que puedan opinar de ellas los expertos o eruditos. Para mi son pequeñas joyas. Hoy voy a hablar de una de ellas. La serie de “Tomb of Drácula” de los años 70.

Marvel en esos años va a buscar nuevos géneros que explotar más allá de sus sempiternos superhéroes, así vamos a encontrarnos con la espada y brujería de la mano de “Conan The Barbarian”, las artes marciales y el cine de espías con “Shang Chi Master of Kung-Fu” y el terror claro está de la que el máximo exponente quizás sea Tomb of Drácula. Con fecha de portada de Septiembre de 1972 aparece el primer número. Durante los 6 primeros números con un baile de guionistas, empezando por Gerry Conway, Archie Goodwin, Gardner Fox y finalmente Marv Wolfman que a partir de su séptimo número toma las riendas argumentales. A los lápices y durante los 70 números que duró la serie, Gene Colan. Y este es uno de los puntos fuertes, que el equipo de Wolfman-Colan, complementándose a la perfección estuvieron mes a mes durante 7 años sin fallar ni una sola entrega, dando coherencia formal al título.

La historia partiendo de los hechos acaecidos en la novela de Bram Stoker, nos relata el devenir del vampiro en la actualidad, o la actualidad que era entonces los años 70, de Drácula (más cercano a la imagen cinematográfica de los filmes de la Hammer que a la actual imagen gótica y romántica que nos ha legado Anne Rice con sus novelas de vampiros) en su lucha con los caza vampiros que le persiguen.
Wolfman, no construye su relato por medio de la acción, sino de los personajes, tanto Drácula, como de los secundarios y este es el otro ingrediente que hace especial la serie, la variedad de personajes que aparecen y desaparecen por sus páginas y que en ocasiones logran eclipsar al protagonista del titulo.

Esos inolvidables Frank Drake, descendiente del vampiro por cuya culpa Drácula ha resucitado y que hará todo lo posible para enmendar su error; Quincy Harker, el hijo de Jonathan y Mina Harker de la novela, que ha continuado la lucha de sus padres aunque en ella haya perdido a todos sus seres queridos; la bella Rachel Van Helsing consumida por odio y la determinación de acabar con el vampiro; Taj, el hindú que nunca dice una palabra y que arrastra una triste historia; Blade, aprovechando la moda de la blaxplotation, una especie de Shaft cazavampiros callejero, rudo y de malas pulgas; Lilith, la peligrosa hija del vampiro cuyo odio por él es inmortal, Hannibal King, el investigador privado y vampiro que lucha contra la sed de sangre que es su maldición; Shiela Whittier y David Eshcol condenados a un trágico fin al igual que Daphne Von Wilkinson cuya codicia cobrará caro; los divertidos Harold H. Harold y la cabeza de chorlito de Aurora; Antón Lupeski y su secta demoniaca que busca el poder que le dará la semilla entre la unión de Drácula y su hija Domini, que conseguirá el corazón del vampiro y le dará un hijo, Janus que como toda la extirpe de Drácula se vuelve contra su progenitor, y un largo etcétera más.

Todos ellos se cruzan con el Señor de las Tinieblas y ese contacto acabará con su inocencia, quienes la conservasen, y en ocasiones será un choque fatal y amargo, con visos de tragedia griega, cuya trama va de la escarpada Transilvania, a las oscuras calles de Londres, de la misteriosa campiña inglesa pasando a una tenebrosa Boston.

Y todo ello narrado con el particular trazo de Gene Colan, el dibujante de las luces y las sombras, que viene ni que pintado para plasmar este oscuro mundo y los personajes que lo pueblan. Si hubiera que elegir una de las obras de Colan sin dudarlo esta es Tomb Of Drácula, porque fue el perfecto vehículo para lucirse y no hay que olvidarse tampoco del entintado de Tom Palmer que le da ese perfecto acabado a Colan que muy pocos entintadores saben darle.

La otra cosa que hace especial a Tomb of Drácula es que tiene un final, no se eternizó hasta el aburrimiento como ocurre con muchas series, un final de serie que coincide con el fin del vampiro. Vale, que luego ha sido resucitado varias veces hasta la extenuación pero los 70 números de Tomb of Drácula son una unidad, un todo argumental que no necesitan de nada más para poder disfrutar de la historia. Aparte de que Drácula no se vio contaminado en su propia serie por la legión de superhéroes de la editorial (aunque fuera de ella el vampiro si se encontrase con lo mas colorido de la editorial) o por lo menos solo aparecieron aquellos que no desentonaban con su oscuro mundo, como el Hermano Vudú, el Dr. Extraño, el Hombre Lobo o Estela Plateada .

Tomb of Drácula se ha convertido por meritos propios en una de las mejores plasmaciones del más famoso vampiro literario. Un tebeo a tener en cuenta y que no merece caer en el olvido.
Por lo menos un servidor no la olvidará nunca.

1 comentario:

Anónimo dijo...

AMEN